El aeródromo militar de Lavacolla anexo al aeropuerto tuvo ayer lunes un día intenso de actividad y es que un Boeing 707 de la Fuerza Aérea Española viajó hasta Santiago de Compostela para realizar maniobras y prácticas en las instalaciones.
Tras su vuelo hacia la capital gallega, la aeronave fue estacionada en la plataforma militar del aeródromo y una vez que el tráfico aéreo fue menor en el aeropuerto compostelano, el B707 comenzó su ciclo de maniobras dirigiéndose a la cabecera de pista de las instalaciones para realizar la primera secuencia de despegue de la tarde en Lavacolla.
Han sido muchos los vecinos cercanos al aeropuerto los que se vieron sorprendidos por la presencia de esta aeronave de gran envergadura sobrevolando las inmediaciones de Lavacolla a baja altura. Apenas unos cientos de metros sobre el suelo y dejando tras de si una gran estela de ruido que en algunos momentos provocó incluso la alarma de vecinos que creían que sucedía algo fuera de lo normal.
Afortunadamente todo estaba dentro de lo previsto y es que el Boeing 707 de la Fuerza Aérea Española se encontraba en Santiago de Compostela precisamente para eso, para realizar maniobras de aterrizaje y despegue en el aeropuerto de Lavacolla y por ello sobrevolaba la zona a baja altura en las inmediaciones de las instalaciones aeroportuarias.
A partir de las nueve de la noche, cuando el tráfico aéreo del aeropuerto comenzaba a repuntar nuevamente, la aeronave realizó su último aterrizaje del día dando por terminadas las prácticas en Santiago.
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