El aeropuerto de Santiago de Compostela vivió ayer uno de esos días negros a nivel operativo y es que el fuerte temporal que azotó Galicia en la tarde de ayer, dejó al aeropuerto de Lavacolla totalmente inoperativo debido a las fuertes rachas de viento cruzado que se registraban en las instalaciones. Ocho aeronaves con destino al aeropuerto compostelano se vieron obligadas a alterar sus planes de vuelo originales y desviarse a sus respectivos aeropuertos alternativos.
La predicción meteorológica no falló un ápice y el viento comenzó a soplar con intensidad a partir de las 18:00 horas registrándose a las 19:40 horas ráfagas de viento de 104 kilómetros por hora en la estación meteorológica del aeropuerto compostelano. Una intensidad que iba variando poco a poco pero que debido a su configuración oeste-este dejaba al aeropuerto en una situación complicada al ser viento cruzado a la configuración de la pista de aterrizaje y poniendo en peligro la seguridad de los aterrizajes.
Tal era la situación en el aeropuerto de Santiago que la tripulación del vuelo de Air Nostrum entre Bilbao y Santiago decidió dar directamente la vuelta y regresar a Bilbao cuando se encontraba todavía sobrevolando Lugo. La seguridad de la operación de aterrizaje se podía ver comprometida y por ello se procedió a regresar al aeropuerto de origen.
Minutos mas tarde corría la misma suerte el vuelo de Iberia Express IBS3880 procedente de Madrid que cuando se encontraba descendiendo al aeropuerto de Santiago de Compostela recibía el último parte meteorológico y optaba por la misma opción: retorno a aeropuerto de origen, Madrid.
Ryanair, sin duda, fue la más afectada por el temporal que azotaba Galicia y es que la aerolínea vio afectados cuatro de sus vuelos con destino a la capital gallega: Gran Canaria, Tenerife Sur, Madrid y Barcelona. Todos ellos se vieron obligados a desviarse a su aeropuerto alternativo, Oporto, donde aterrizaron sin mayor contratiempo. La aerolínea ha reprogramado para hoy, sábado, vuelos especiales desde Lavacolla para recolocar a todos los pasajeros afectados.
La compañía Vueling también sufrió también las consecuencias del temporal y es que su vuelo VY1672 procedente de Barcelona era el primero de la noche en intentar el aterrizaje y se veía obligado a frustrar el intento para elevar rapidamente el vuelo por el fuerte viento y desviarse al aeropuerto alternativo, Madrid. La misma suerte corría el vuelo VY7389 procedente de Londres Gatwick que era desviado al aeropuerto de Oporto.
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